TE LO ENTREGO

Me preguntas que si entregarte
la vida no es mucho?
No, no lo es.

Que si te amo mucho, mucho?
Eso sí, muy bien lo has dicho.

Pero nada es mucho para ti, nada es demasiado, nada es suficiente.
Para ti, sólo lo mejor... Lo más lindo... Para ti, todo lo quiero perfecto...

Te mereces tanto, vida mía. Te mereces más que a esta niña que daría su vida por ti si fuera necesario.

Sin embargo, hoy no ganaríamos nada con eso.
Por eso prefiero vivir y entregarte cada segundo, cada minuto, cada hora, cada día, cada noche, cada sonrisa, cada palabra, cada gesto, cada lágrima, cada sueño, cada pensamiento, cada meta.

Son tuyos cada centímetro de mi piel, cada beso de mis labios, cada locura de mi lengua, cada caricia de mis manos, cada roce de mis piernas, cada parte de mi cuerpo...

Prefiero entregarte a ti, mujer hermosa, cada paso, cada salto, cada caída, cada canto, cada poesía, cada duda, cada melodía, cada mirada, cada aliento, cada latido, cada suspiro, cada movimiento.
Y aún siento que esto es poco, y a ti quiero entregar lo mejor de mi: ese pedacito de Dios que llevo dentro.

A ti, preciosa, quiero entregarte mi corazón,
mi esencia, lo único que en realidad tengo,
lo que verdaderamente soy...

A ti, que eres la luz de mi camino, te entrego mi corazón.

Me lo cuidas amor?

Te amo y nunca quiero olvidar que amar es entregarlo todo sin reservas y sin condiciones.